Leticia Teresa Pontoni: ADRY DEL ROCÍO, renaciendo con el arte

Adriana del Rocío García Hernández. Es mexicana, de Guadalajara, Jalisco y es una artista que nos muestra como se ve el mundo en 3D en sus murales.

Su primera exposición la hizo a los once años. En sus comienzos el dibujo y la pintura era un pasatiempo, un juego. A los dieciséis años se diplomó en artes plásticas. Ahora ya es una profesional. Y hoy me visita en mi blog.

--¿Con qué elementos o materiales se hacen esos murales enormes que has hecho en Alemania? Es un bello esfuerzo ya que me imagino que dan trabajo.

Elementos físicos como herramientas, una grúa, medidas de seguridad como arneses. Siempre con arneses.

Materiales: acrílico y brochas. Pido referencias del lugar. Pido fotos del lugar donde voy a a hacer el mural.

Siempre busco características mías. Siempre dejo la característica, el toque de elementos mexicanos. Tengo en cuenta el lugar, la historia, tradiciones y el mensaje que voy desarrollando, que quiero dar. Es el el elemento principal, la idea y el mensaje a partir del entorno.

--A los cuatro años lograste tu primer reconocimiento internacional. ¡Increíble! Contame más por favor.

Sí, a los cuatro años ya gané mi primer concurso Internacional de pintura. Pero bueno, no diría que como artista, en ese entonces era sólo una niña y no sabía que me iba a dedicar a la pintura. No tenía mi camino definido.

Pero, pues si, fue gracias y culpa de mi mamá,somo cuatro hijos, tres hombres y una mujer. Y nos puso a pintar desde niños. Yo soy la tercera. Cuando yo nací pues había mucho material ya que vio que a mis hermanos mayores les gustaba mucho la pintura. Para mi fue una forma muy natural, parte de mi crecimiento rodeada de colores y papeles. Me cuenta mi mamá que ya ella no me dirigía en el dibujo ni a mi ni a mi hermano más chico, lo hacían mis hermanos mayores. A mi mamá se le hacían muy bonitos nuestros dibujos así que nos buscaba concursos donde meter nuestros trabajos.

El primero que encontró fue el que se hacía por medio de una empresa japonesa, al dibujo lo hice a mis tres años, y el resultado del concurso tardó un año en llegar así ya tenía cuatro años. Gané una medalla de bronce o plata, no recuerdo. Y más material para seguir pintando. Me motivó mucho. Y al año siguiente volvimos a ganar. Se nos hizo una adicción pintar y ganar. Ganamos bicicletas, viajes, becas de pintura.Hasta los diez años fui a clases de pintura. A los 10 años comencé mi carrera de pintora. Entré a un curso para niños y a los dos años los directivos del Instituto dijeron que ya no podía seguir allí. Así que entré al diplomado a mis doce años que duró cuatro años. A mis dieciséis me gradué. Luego llegó la Universidad en Artes.

--¿Porqué te gusta ser "artista urbana"?

Porque el arte es para todos.No es exclusivo de una persona, de un dueño. Es un arte libre y tiene más alcance, más impacto. Y bueno, con mis pinturas llevo un mensaje. Y funciona más para que llegue el mensaje. El reto personal es mayor cuando hago una obra en un espacio público. Hacer tu obra en tu taller, en un estudio es como muy cómodo. Tu pones tus horarios, es más relajado, tomas café, agua, nadie te ve, nadie te apura, nadie te juzga, escuchas música.

En un lugar público es un reto, hay mucha presión, y el espacio es muchísimo más grande. Sólo los que hacemos esto sabemos de que se trata. Las horas invertidas son pocas, tienes una fecha límite sea para un concurso o para un festival. Y el clima tiene mucho que ver. Mucho frío, calor, viento, lluvia. Rara vez la temperatura es ideal. La gente te ve, te pregunta. Para mi el acercamiento con la gente me gusta. Es un reto mayor.

--Una lista muy larga de premios y reconocimientos. ¿Cómo te sentis al ver el largo camino que has recorrido?

Siento muchas cosas al ver toda mi trayectoria. Me da obviamente mucha satisfacción y no es por presumida, no me considero una persona presumida y tampoco con suerte. Muchas veces las personas dicen: ¡Que suertuda! Siempre ganas. O qué talentosa. Yo no considero que sea por suerte o por talentosa. Todo ha sido producto de muchas horas de trabajo o dedicación. Y gran pasión, y hasta cierta forma terquedad. Porque me exijo mucho. Nadie te exije tanto como uno mísmo. He puesto allí toda mi vida. Y muchos sacrificios. En el sentido de que deje de ir a fiestas en mi infancia y adolescencia, o cuando era joven, de salir con amigos, idas al cine. Es que quería pintar o tenia que exponer. De muy chica hice exposiciones. O porque quería meter una obra en un concurso. Al final entendí y descubrí que era necesario. Practicaba, hacía muchos bocetos. Y ahora veo el resultado, no ha sido por casualidad o suerte.

--¿Por qué pintas? ¿Qué sentimientos llegan a vos al crear?

Es mi forma de entender el mundo, de comunicarme con el. De hacer lazos sociales, lazos de amistad. Hasta incluso amorosos. Gracias a la pintura conocí a mi esposo. También es pintor. Pintar me da mucha satisfacción, me hace sentir, me hace volar, canalizar mis miedos. Para mi es tan vital como respirar, tomar agua. Es una emoción que la fui generando de muy chica. Y no puedo dejarla, es parte de mi vida. A veces son quince o dieciséis horas, a veces veinticuatro si es un concurso. Sufres de todo pintando, alegrías, tristezas, exorcizas tus demonios, temores, híjole, son tantas las emociones. A veces lloro mientras pinto. De alegría, emoción, recuerdos. Todo lo que conlleva estar ahí pintando. Todo queda allí entre colores.

--¿Cómo se realiza un dibujo en 3D? Explicame por favor. ¿Usas computadora?

Es una pregunta complicada. Es como tener que explicar cómo dibujas, o como tocar música. Ha sido también parte de un proceso de experimentación. De prueba y de error. De observar mucho, cambiar tu chip. De como ver las cosas, comunicar el mensaje en 3D. Vas desarrollando trucos, estrategias para ir perfeccionando tu trabajo. Es complicado.

Al principio no usaba computadora. Luego si. Ya que me ahorraba mucho tiempo. Es una herramienta más de trabajo para poderme apoyar y hacer anamorfosis. Se me hace complicado explicar bien como se hace el trabajo en 3D.

--Y no trabajas sola. ¿Tu hermano te acompaña? ¿Es artista también?

Sí, mi hermano Carlos Alberto el menor, en muchas ocasiones hemos trabajado juntos. Y empezamos a trabajar en equipo porque queríamos hacer obras más grandes. Nos hallamos muy bien en estilos ya que crecimos juntos en esto de la pintura. El es otro artista urbano. El hace sus propuestas, sus propios diseños, sus propios trabajos individuales. Yo también hago los míos. A veces pido su apoyo. O el pide el mío.

Es una forma más fácil de trabajar en estas obras monumentales, tenemos muy poco tiempo y para una sola persona es muy difícil hacerlo. Y sobretodo con la técnica que usamos, pura brocha. Nada de latas de spray. Es más lento, más esfuerzo, nos cansamos más. Y a veces a este equipo se suma mi esposo que es también es un artista 3D muy reconocido en Europa. De hecho el hacía 3D antes que nosotros. A veces trabajamos los tres. Pero cada uno sigue sus carreras propias e individuales.